Un día ventoso, hemos compartido una salida muy interesante, en la que se nos ha comentado muchos aspectos para mi desconocidos de la vida de San Victorián (San Beturián)
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| El guía |
Voy a relatar algunos para que no caigan en el
olvido.
El santo
venía de Italia y pasó gran parte de su juventud en Francia, rodeado de un
grupo de seguidores jóvenes (de ambos sexos), cuando cruzó los Pirineos, ya
contaría con 40 años,
Parece ser
que hizo algunos milagros en la zona y que contó con la condición de milagrero,
a él acudían gentes de varias comarcas para curarse.
El primero
de los milagros lo realizó en la Fuensanta, encima de Sanlorien, de donde hizo
salir agua de una roca, a ella acudían todos los de las comarcas vecinas en
tiempo de rogativas para pedir agua.
El Santo,
parece que en un momento dado de su estancia quiso separarse de su grupo de
seguidores para hacer vida de asceta, y pasando por la zona de Fuendecampo, vió a un agricultor sembrando, y le comento
que si le hacía el favor, cuando pasaran unos jóvenes y le preguntasen por él,
dijese que si que le había visto, y cuando le preguntasen cuando, les dijese que
cuando estaba sembrando, El agricultor al ver que no tenía que mentir, no vió ningún
problema y el santo le dijo que si así lo hacía tendría una gran cosecha. Al
rato pasaron el grupo de jóvenes y preguntaron si había vidto al santo este
dijo que si, y cuando le preguntaron cuando, este contestó que cuando estaba
sembrando, lo jóvenes miraron los campos y vieron una gran cosecha por recoger,
con lo que pensaron que el santo había pasado hace mucho tiempo, y dejaron de
seguirle.
El crucifijo
que se nos muestra es un símbolo pagano que proviene de la simbolización de los
cuatro elementos, está en un círculo de piedra que quiere representar el Sol en
la tierra
La piedra
Campana, donde dicen que se sentaba el santo, en este momento sustituida por otra,
al golpearla sonaba como una campana de bronce, por lo que parece este tipo de
piedras son de un tipo de granito negro, y no es el único sitio donde hay, de
ahí su nombre, parece ser que también podría ser una manera de comunicarse con
la cueva de la Espelunga, a través del sonido orientado por la roca vertical.
Al morir el
santo, sus restos parece ser que se pusieron en un arca, que se sacaba cada
año, ésta se sumergía en una balsa y según el peso con que salía se
pronosticaba las lluvias del año, parece ser que un año pesaba mucho al salir y
a continuación empezó a tronar y granizar y los únicos que la custodiaron
fueron los del pueblo de Buil, a partir de ese momento fueron ellos los que
decidían que pueblo iba a transportar el arca ese año.
El monasterio
de San Beturián, se llamó así por ser el santo su último abad, este monasterio
se llamaba anteriormente de San Martín de Sas, éste fue dependiente de Roma
desde su comienzo, y al pasar a depender del obispado de Barbastro muchos
monjes se negaron y marcharon a hacer vida de asceta a sitios superiores.
Un gran día, gracias a nuestro Guía que nos contó todo esto y mucho más.
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