Nuevo camino de éter dorado,
delante de mi brilla la fuente de la vida,
el tercer ojo, formador del todo,
de un interior que no conoce origen,
ni entrada, ni salida.
un destino sin forma, no parece un destino
sin embargo me gusta navegar entre las ondas
que a mis ojos aparentan un camino
prana, rizos, suaves olas,
una visión divina de la vida
de transparente y fino hilo tejida
Que serías mundo... sin tus brillos,
que serías orden... sin las ondas,
un pozo seco, una fuente sin agua.
Que sería el destino, sin pasado,
y el deseo de saber, sin ignorancia.
Cuando la borrachera de brillos se oscurezca,
Querré sentir con mis dedos tu recuerdo,
una nueva senda para hacer presente,
anhelo, verdad, texturas y deseo
Si algún día percibir tu verdad no puedo,
si algún día es cierto y sin saberlo muero,
si ese día de verdad llegara
busca mi luz en un profundo sueño
Así podría ver lo que no veo,
y encontrar sentido a lo que he escrito
tocar así la luz divina de tus rizos
la incógnita, sin prejuicios, de tu camino nuevo.
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